Economía ecológica, descentralizada y solidaria para satisfacer las necesidades de todxs, utlizando la tecnología que más sea adecuada restituyendo la idea de producir para vivir y no vivir para producir.
Autoorganización de la vida y descentralización política en consejos. Decisiones desde asambleas locales, regionales y coordinaciones con enviadxs sin poder político sino solo con mandato de asamblea y siempre revocable.
Defensa del territorio con milicias populares mientras exista el peligro, en contra de los ejércitos y policía, quitando la posibilidad de una dictadura de cualquier grupo. Organizaciones de defensa dependientes localmente y sin centralización de mando único.
En definitiva, destrucción total de la representación y capacidad de explotación de las personas y el mundo. Sustitución por estructuras directas sin acabar, pero si transformar, a aquellas que sirven socialmente como las de salud, comunicación, y socialización-educación…
Serpies.
Fuente: Periodicoanarquia.wordpress.com