ELA a las puertas del XV congreso, nos adelantan su reflexion sobre la ultraderecha. Un paso adelante en la lucha diaria contra el fascismo
“Benetan garrantzitsuak diren gauzak; Aktibatu, Lortu, Zaindu” El XV Congreso confederal de ELA tendrá lugar los días 24 y 25 de noviembre de 2021, para el cual el sindicato ha preparado una serie de documentos en los que aborda el peligro que supone el avance de la Ultraderecha
Una nueva entrevista de Juanjo Basterra a Mitxel Lakuntza ELA, que próximamente publicaremos en Sare Antifaxista
Tras el ataque fascista en Italia a la CGIL: “El fascismo es un problema europeo, no solo italiano” Maurizio Landini, secretario general de la Confederación General Italiana del Trabajo, Mitxel Lakuntza
se solidarizaba en las RRSS “Hainbat faxistek italiako #CGIL sindikatua erasotu dute. Gure klase elkartasuna helarazi nahi diegu”.
Días después, en la movilización de Bilbao de 24/10/2021 afirmaba:
A la ultraderecha no se le gana haciendo políticas de recortes, ni olvidando las preocupaciones de la gente. A la ultraderecha hay que combatirla con lo que le duele, con programas políticos de izquierda.
Hemos hablado con Mitxel Lakuntza ELA y nos adelantan su reflexión sobre la ultraderecha para el XV congreso en Bilbao
En su informe gestión dice ELA….
– Necesitamos alternativas al capitalismo
El ciclo neoliberal que comenzó hace ya varias décadas para favorecer una mayor concentración del capital mediante la desregulación laboral y social hace sentir sus consecuencias
hasta el presente. El modelo de globalización (más evidente en la pandemia), la explotación de los recursos del planeta y sus efectos sobre el clima, el incremento de la desigualdad y la
pobreza como consecuencia del saqueo creciente son algunas de las características de ese ciclo, acompañado en los últimos años por el auge de la extrema derecha y el autoritarismo.
En los años previos a la pandemia –y en oposición a este capitalismo insostenible social, económica y medioambientalmente– se produjo un incremento significativo de las movilizaciones sociales en muchos lugares del mundo. No pocas de ellas tuvieron lugar en América Latina, conocido campo de experimentación del neoliberalismo. El encarecimiento de productos y servicios básicos, el deterioro de las condiciones de vida, han despertado la lucha por otro modelo social o los derechos de las mujeres y han provocado levantamientos populares en países como Colombia, Chile, Brasil, Honduras o Argentina… También en Europa, y especialmente en Francia, se han dado respuestas como la de los Chalecos amarillos
Como decíamos, en este cuatrienio hemos asistido a una ofensiva mundial de una ultraderecha de tinte neoliberal, racista, xenófoba, antifeminista, anti LGTBIQ+, enemiga de las referencias colectivas y del sindicalismo. Esta ofensiva alcanza incluso a la representación política europea, con gobiernos presididos o condicionados cada vez más por partidos de este tinte. Es un hecho que la desigualdad, el desempleo, las precariedades y la ausencia de horizontes para amplias capas de la población ofrecen a la extrema derecha una oportunidad singular para extender su propuesta en una sociedad falta también de políticas redistributivas.
Esta realidad debe interpelar directamente a todas las fuerzas de izquierda (políticas y sindicales) y urgirnos para construir referencias y alternativas que pasan por organizar a las clases populares y a la clase trabajadora. No podemos asumir el riesgo derivado de no combatir esta ofensiva, y es nuestra obligación fortalecer las referencias colectivas en el mundo del trabajo y en el conjunto de la sociedad.
– Crisis del estado
La emergencia de la extrema derecha, finalmente, balancea todo el arco político. El peligro
de una involución política (con importantes consecuencias tanto a nivel social como nacional) es evidente, pero tenemos que denunciar la manera en que fuerzas de izquierda están apelando a ese peligro para no hacer avanzar precisamente una agenda social y de progreso que sería la mejor vacuna para al avance de la derecha.
En su informe gestion dice ELA….
– Europa es una fortaleza inaccesible para las demandas de las clases populares y de los pueblos.
Poco está ayudando, en este sentido, la deriva ideológica de una gran parte la socialdemocracia política y sindical en Europa. No nos referimos tan sólo a la asunción acrítica de muchos postulados neoliberales, sino también al temor irracional hacia categorías como la de soberanía, lo cual está favoreciendo su patrimonialización por la extrema derecha. Por esa vía, fuerzas progresistas acaban mirando con desconfianza procesos políticos y sociales de empoderamiento ciudadano mientras se acepta con naturalidad que corporaciones privadas e instituciones no elegidas democráticamente acaben diseñando el destino de los estados europeos
Fuente: Sareantifaxista.blogspot.com