
El Comité de Relaciones de la Internacional de Federaciones Anarquistas (CRIFA) se ha reunido en Marsella los días 19 y 20 de marzo de 2022, y ha debatido asuntos sobre la guerra en curso en Ucrania. Aunque hay diferentes puntos de vista entre las Federaciones miembros, sobre los que nos comprometemos a continuar el intercambio y el debate constructivo, importantes puntos comunes han surgido del debate.
Condenamos la criminal agresión a Ucrania promovida por el gobierno ruso, junto a todos los militarismos, y nos solidarizamos con los pueblos oprimidos de ambos lados de la frontera, promoviendo el apoyo activo a las víctimas del conflicto, a los refugiados, desertores y prisioneros de todos los bandos de esta guerra y de su potencial expansión. En los contextos en los que operan nuestras diferentes federaciones, debemos denunciar y oponernos al papel de la OTAN, de los EE.UU. y de la UE en la creación, también, de las condiciones previas para permitir que el Estado ruso ataque a su vecino más débil con la complicidad de su títere, Bielorrusia. Denunciamos el aumento del autoritarismo en todo el mundo en los últimos años, que ha visto el creciente papel de los ejércitos en las políticas públicas. Con la situación actual, destacamos especialmente la creciente militarización de la sociedad en el contexto del creciente rearme en toda la UE, en medio de los llamamientos generalizados a favor de un Ejército Europeo, en detrimento del gasto social.
Los pobres y oprimidos del mundo son siempre los perdedores en las guerras. Se han convertido en carne de cañón y han sido desarraigados de sus hogares, y se enfrentan a la pobreza y la enfermedad como resultado de esta guerra. Al mismo tiempo, los patrones globales siguen trabajando para controlar los recursos del planeta. Nos oponemos al capitalismo global y al nacionalismo que son las causas de la guerra. Por el contrario, tenemos que luchar en la guerra de clases, contrarrestando la industria bélica y el gasto público en la guerra, y toda la lógica de la guerra, y promover movilizaciones horizontales más amplias de los trabajadores y las colectividades.
Asimismo, insistimos en el peligro de cometer el error de defender a «nuestra» nación o «nuestro» país, resaltando nuestras posiciones anti-nacionalistas y de negación/rechazo, ya que nuestro enemigo está en «nuestro» país y es «nuestro» estado nacional o burguesía nacional. Por el contrario, pretendemos construir la solidaridad entre todos los proletarios y subrayar el carácter global de los estados capitalistas.
Confirmando nuestros valores históricos de internacionalismo, solidaridad y parentesco global más allá de las fronteras, confirmamos nuestra oposición a todos los crímenes y masacres perpetrados por el capital y el Estado, desde el genocidio de los pueblos negros e indígenas que continúa hoy en Brasil, América Latina y en todo el sur global, hasta la destrucción del medio ambiente perpetrada por la lógica de los Estados, la ganancia y los mercados que está amenazando la vida misma de nuestro planeta.
En la guerra perenne de los opresores contra los oprimidos, vemos el empeoramiento de las condiciones de vida de los pobrws en todo el mundo debido a la pandemia y a las guerras regionales iniciadas en los últimos años, como consecuencia del aumento del coste de los productos básicos y del mayor gasto en armamento debido a la economía de guerra. Insistimos especialmente en el drama de los migrantes, de los individuos marginados y racializados a los que se les niegan los derechos más básicos, y nos ponemos al lado de los últimos, de los olvidados, de los discriminados, contra los estados, el capitalismo, el fascismo, el racismo, el patriarcado y la explotación.
Comisión de Relaciones de la Internacional de Federaciones Anarquistas (CRIFA)
19 de marzo de 2022
Fuente: Federacionanarquistaiberica.wordpress.com