January 7, 2022
De parte de Grupo Anarquista Apoyo Mutuo
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l policía de balcón de vez en cuando baja al súper. Necesita leche, birras y prismáticos. Podría pedirlos por Internet, pero el caso es que le gusta tocar el género e inspeccionar a sus “conciudadanos”, por si no se portan bien.

Así que si por un casual ve a alguien intentar llevarse una caja de gambas de la tienda (entre 4 y 10 euros, creo), lo que hace es abalanzarse sobre el desgraciado, agredirle y retenerlo hasta que llegue la policía para llevárselo a comisaría. Por una caja de gambas. Repito, por si acaso alguien lo flipa: una caja de gambas.

Esto ha pasado, y lo peor es que si a esa turba de energúmenos les pillas en un día tonto lo mismo deciden terminar el linchamiento y colgar al tipo del cartel del aparcamiento del puñetero súper.

¿En que momento la gente deja de ser gente y se convierten en hijos de puta? ¿Nacemos así y es la educación y la cultura lo que atempera nuestros ánimos y nos muestra más “humanos”? ¿O, al contrario, es la educación y (in)cultura violenta en la que estamos inmersos, la propaganda constante fomentando la delación, el castigo ejemplar, la venganza…lo que nos convierte en seres sensibles sólo a los peores instintos?

Si es lo segundo, habrá que felicitar a los responsables de la cosa, les esta quedando muy bien este mundo de cerdos sin cabeza. La distopía está quedando cojonuda.

A lo mejor te preguntas, a estas alturas, que se supone tendría que hacer uno si ve a alguien robar comida en el súper. Es muy sencillo: las personas decentes nunca ven a nadie robar comida del súper. Nunca. Y punto.




Fuente: Apoyomutuo.org