January 27, 2022
De parte de El Topo
612 puntos de vista

Suponemos que si estás leyendo este editorial no hará mucha falta que te convenzamos de la necesidad de los medios alternativos. No vamos a entrar en definir qué jechura deben tener los medios que se engloban bajo esta etiqueta, que sobre eso hay kilos de tesis buscando la exactitud de sus características, pero vamos, ya sabéis: autogestionados, independientes, que traten temas fuera de la agenda, punto de vista crítico… En fin, ¿esto que tienes entre las manos? Po más o menos. Hacemos lo que podemos.

Tampoco vamos a poner el ventilador de mierda contra los medios de comunicación de masas, que ya os sabéis de sobra los pecados del eje del mal: fake news, intereses empresariales, económicos y partidistas, reproducción de la ideología dominante… No nos hagas hablar que nos falta imprenta.

No vamos a sacar la carta de la penita hablando de la precariedad que acompaña estos proyectos y que supone hacer el camino cargando con una piedra de diez kilos en el lomo. Sin recursos todo cuesta más. Por una vez, y sin que sirva de precedente, tampoco vamos a hablar de Gramsci y de la hegemonía (y mira que nos gusta dar la turra con la hegemonía y los contrapoderes), eso que ganáis. Es más, ni siquiera vamos a hablar del derecho a la información, que pertenece a la familia de derechos que gusta nombrar pero no respetar.

Total, que más de una a estas alturas se estará preguntando ¿pero estas buenas topas van a ir al grano y van a hablar de algo de una santísima vez? Cut the crap. Ok, nosotras hemos venido hoy aquí a hablar de llamas.
Llamas de fueguito, no del mamífero del Altiplano. Porque creemos que al fin y al cabo se trata de eso. Por un lado, la llama que se te enciende cuando descubres un tema, un espacio, un proyecto y piensas ¿pero la gente conoce esto? Y nos entra un fuego zumbón por dentro que nos impulsa a llevar la historia a toda la gente que se pueda. Y por otro lado, nuestro motivo oculto es, por supuesto, encender más llamitas en todas aquellas que nos lean. Prender un calorcito dentro que te lleve a mirar desde otro sitio, a buscar el revés, a hacer y bichear.

Y muchos preguntan, ¿y no sería más fácil usar un lanzallamas cual Khalessi en vez de ir a paso de tortuga llamita a llamita? Bueno, sí, más rápido sería, pero también arrasaríamos con todo. Así que seguimos con nuestro método: encendiendo hogueras con dos palitos pero también con clippers, no se crean que somos anarcoprimitivistas en el tema de extender nuestra fe en implosionar un poquito de capitalismo por la vía de la palabra.

En este número tan especial, que tan modestamente hemos dedicado a nosotras mismas y nuestras amigas, contamos con las letras de nuestras hogueras hermanas: El Salto Andalucía, La Marea, La Poderío, El Salmón Contracorriente, Mapa, CQFD, Portal de Andalucía, Radio Almaina, etc., todas las que han querido y podido (recuerden, la precariedad) participar en nuestra celebración del número 50.

Así que, por favor, déjense prender por nuestra llama, pásenla a otras, consuman medios de comunicación críticos, compártanlos y suscríbanse también, que está la cosa achuchá.




Fuente: Eltopo.org